La hidratación y su importancia en nuestra salud.
La hidratación es un proceso fundamental para nuestro organismo ya que el cuerpo humano está formado por un 60% de agua. La deshidratación puede provocar daños considerables que debemos evitar, por eso te explicamos cómo identificarlo y cómo prevenirlo.
La importancia de la hidratación.
El agua cumple unas funciones esenciales en nuestro organismo. La más importante de ellas es que transporta y distribuye nutrientes y oxígeno a células, órganos y músuclos para que funcionen correctamente.
Pero también ayuda a eliminar las toxinas que producen los órganos por su propio funcionamiento, regula la temperatura corportal, participa en el proceso digestivo y ayuda en la lubricación y mantenimiento de nuestas articulaciones.
La pérdida de agua en nuestro organismo es constante, ya que la expulsamos al respirar, al sudar, al orinar, al llorar. Perdemos aproximadamente unos 2 litros de agua al día, perdiendo también con ella sales minerales y nutrientes.
La deshidratación.
Cuando no reponemos la cantidad de agua perdida al día podemos sufrir deshidratación. Ésto provoca una serie de efectos que pueden agravarse a medida que la deshidratación aumenta. Los primeros efectos más comunes son los siguientes:
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Sed
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Dolor de cabeza
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Debilidad
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Mareos
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Fatiga
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Somnolencia
Beber líquidos nos aporta un 75-80% del agua perdida, mientras que el 20-25% restante procede de los alimentos que comemos. Pero no sólo es importante reponer el agua, sino también las sales y los nutrientes perdidos, por eso se recomienda también beber infusiones, zumos y lácteos, y comer frutas y verduras. En ocasiones incluso bebidas isotónicas en el caso de los deportistas.
Y lo más importante que debes recordar es que siempre es mejor uan hidratación progresiva durante todo el día. Para ayudarte te dejamos aquí el enlace a nuestra selección de infusiones.
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